Nevera Gangsta

Primero de todo, disculpad no haber actualizado el blog, pero entre el comienzo de las clases, entrenamientos (habrá una entrada sobre esto) y que andamos un poco desorganizados con el material, pues se nos ha ido la olla. De todas maneras, aquí viene un nuevo reportaje.



11 de septiembre. El veranito se esta acabando, pero el calor sigue ahí y la nieve no llega. Hay mucho mono, por lo que desde el OSK se decide hacer una visita a la nevera. En un principio, iba a servir de entrenamiento para el Cab5, pero al final se quedo en el intento. Así que nada, quitarles el polvo a los esquís, meterlos en las fundas y directos a Madrid, como no, en la Navara de Jokin. Se nota mucho mono en el coche, la música toda de freeski.

Después de 4-5 horas de viaje, llegamos a Madrid. Comimos un poco para coger fuerzas y fuimos directos a por los tickets. 5 tickets de 4 horas: Pipa, Eukeni, Rabo, Jokin y yo. Corriendo a cambiarnos, el mono nos puede. Mientras nos cambiamos, podemos observar el tipo de video que queremos hacer: Gangsta. Camisetas XXL, pañuelos para la cara (alguno con dólares), chupas XXXL y abiertas. Solo nos faltan un par de pipas.

Una vez con la vestimenta puesta, entramos adentro. Frío. Pasamos de largo de los bastones, hay que ir no-poles. Miramos los módulos, están bastante bien: Al principio un mini raíl de 2-3 metros en bajada y entrada street. Luego un rainbow junto con el cajón plano-bajada cerrado. El rainbow no estaba muy bien la entrada, el único que le estuvo dando de continuo fue Eukeni. Los demás alguna pequeña incursión, con mal desenlace para Iñaki. Después de eso, el SanFrancisco. Yo no le pille muy bien, pero los demás estuvieron sacándose buenos trucos. Y ya para finalizar, un cajón plano, perfecto para aprender cosas nuevas y otro rainbow, más pequeño y en cajón, aunque tampoco le dimos mucho.

Fueron cuatro horas intensas, con dos pequeños descansos para beber algo y descansar un poco. Nos juntamos con bastante gente: Cani, Sisko y Rodri (lastima que fuera al final) con los que estuvimos ripando a gusto (un saludo) y también con Rober Puente, como siempre un placer estar contigo.

Sobre los trucos no voy a comentar casi nada, para eso mejor ver el video del principio. Lo único, decir que se vio un truco que llevábamos mucho tiempo detrás de el, aunque no nos salía. El 270 in pretzel 270 out, que aunque solo haya grabado uno mío, Jokin también se lo saco. Hubo otros trucos buenísimos también, pero vale más un video que mil palabras.

Una vez acabado el pase de 4 horas, salimos de allí, nos desvestimos con la emoción todavía en el cuerpo. Cenamos un par de guarrerias en un MacDonalds de allí y nos montamos otra vez en el coche, para volver a casa. Otras 4-5 horas de vuelta, esta vez ya más calmados, pero con un buen recuerdo y ganas de repetir. El 29 volveremos por allí, a ver cuantos metros de barandilla somos capaces de grindar.